Mesa de Redacción
Enrique Yasser Pompeyo
Los habitantes de la comunidad de San Marcos de León se encuentran abandonados a su suerte por la alcaldesa de Xico, Gloria Galván Orduña.
La población está a merced de los delincuentes.
De acuerdo con un documento dirigido al gobernador Cuitláhuac García Jiménez, los ciudadanos denuncian la falta de apoyo e interés por parte de la presidenta municipal.
Pero también dan varios datos reveladores. Además de los asaltos y robos, afirman que hay drogadictos que controlan ciertas zonas; a esto se suma la supuesta presencia de camionetas que presuntamente distribuirían drogas.
El asunto es delicado y la alcaldesa ni se inmuta; hay una desidia oficial. El ayuntamiento sólo cuenta con una patrulla y en malas condiciones.
Por ello, los ciudadanos han optado por conformar las redes denominadas “Vecino Vigilante”, pero sin contar con el respaldo municipal.
Tras una reunión sostenida este lunes en San Marcos de León entre representantes de la comunidad y funcionarios estatales se espera que haya un cambio.
El compromiso lo asumieron el comandante Alan Cuetero, delegado de la Secretaría de Seguridad Pública en la zona; el comandante Raúl Polanco, jefe municipal de Xico, así como el comandante Héctor Vázquez Mejía, de Redes Vecinales. En representación de los vecinos estuvo el agente municipal, Olegario Tlapa Alarcón.
De acuerdo con los habitantes de la comunidad, en los últimos meses se han registrado ocho decesos, en su mayoría de jóvenes, relacionados con la violencia, inseguridad y hechos delictivos.
San Marcos de León cobra relevancia porque es la entrada a seis municipios; de ser una comunidad tranquila se convirtió en una zona insegura donde se registran asaltos, crímenes y supuestos suicidios.
Las autoridades estatales y municipales deberían poner especial atención a la región en donde poco a poco permea la delincuencia; de no atenderse la problemática, Xico podría convertirse en un lugar sin ley como sucede en el municipio de Coatzacoalcos.
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