Dario Pale
Xalapa, Ver.- Estudiantes de la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana (UV) anunciaron la obra de teatro «La máquina de sumar», donde hacen ver que el hecho de ser sustituidas las personas con máquinas se van perdiendo las emociones y los sentimientos ya que muchas veces puede uno convertirse también en una máquina.
En conferencia de prensa Claudia Bravo y Emmanuel Lagunes, invitaron a la ciudadanía para que asista a la presentación de la obra la cual se presentará del 21 de septiembre al 8 de octubre en el foro «Fernando Torre Lapham» de la Unidad de Artes.
La puesta en escena es dirigida por Enríque Vásquez Burgos y tiene como temática principal el avance tecnológico y el desplazamiento del hombre, mismo que es representado por un personaje principal que durante la obra pierde el control y comete diversas acciones que definen su destino.
«Es una propuesta de teatro corporal donde somos 12 actores de séptimo y noveno semestre de la facultad, quienes desde el inicio de la obra estamos constantemente moviéndonos, bailando, danzando, actuando sin un descanso», señalaron.
Las funciones de «La máquina de sumar» se realizarán los días jueves y viernes, en punto de las 20:00 horas, y sábados y domingos a partir de las 19:00 horas.
El costo de la entrada general es de 100 pesos, y de 60 pesos para estudiantes y adultos mayores con credencial de INAPAM. El foro ‘Fernando Torre Lapham’ se ubica en la calle Belisario Domínguez número 25, en la zona centro de Xalapa.
La obra de teatro representa el como las personas son reemplazadas por máquinas pese a que trabajaron durante mucho tiempo, actualmente los actores también ya pueden ser remplazados por la inteligencia artificial.
En la actualidad eso crea mucha incertidumbre en los trabajos donde pueden llegar a ser despedidos y remplazados por una máquina después de trabajar por muchos años, lo cual es malo ya que siempre hace falta el tacto humano.
El remplazo para muchos es benéfico ya que gasta menos y gana más pero para los trabajadores es malo ya que es perder un empleo y ya no pueden llevar el sustento a sus hogares, además el trato con las máquinas hace que poco a poco se vallan perdiendo los sentimientos y las emociones ya que no es muy común ver a personas atendiendo o riendo.
Finalmente comentó que «el asumir la parte robótica, frívola como lo es una máquina le quita el espacio y el lugar a los sentimientos humanos que somos una especie con demasiada emisiones en constante cambio».