Importándole poco la responsabilidad que implica su cargo en el gobierno, Jaime Rolando Urbina Torres, alcalde del distrito de Tantará, en Perú, fingió estar muerto para evadir a la justicia.
El funcionario fue detenido por agentes de la Policía Nacional, acusado de violar la cuarentena obligatoria que se impuso en el país para contener la propagación del coronavirus. ¿Su motivación? Salir a beber con unos amigos.
El Alcalde y sus amigos se reunieron en un bar
Los hechos sucedieron la noche del pasado 18 de mayo. Según reportes de medios locales, Urbina Torres decidió ignorar las medidas de distanciamiento social obligatorio y se fue a tomar unas copas en un bar, con algunos colegas.
Alrededor de la medianoche, vecinos de la zona reportaron a la policía un fuerte escándalo proveniente del establecimiento. Los uniformados arribaron al lugar con las sirenas de sus patrullas encendidas, lo que alertó al alcalde.
Se hizo pasar por una víctima del Covid-19
Para evitar su detención, Urbina Torres decidió meterse dentro de un ataúd, con todo y cubrebocas, para hacer creer a los agentes que era uno de los miles de muertos que se han registrado en Perú por el Covid-19.
Los amigos del Alcalde lo emularon y también se introdujeron en otros cajones de madera, pero sus esfuerzos resultaron inútiles.
El alcalde y su grupo de colegas fueron detenidos y trasladados a la comisaría, donde se les practicó un test para comprobar que se encontraban bajo los efectos del alcohol.
Esta no es la primera vez que Urbina Torres se ve en medio de la polémica por su desempeño como Alcalde.
A principios de mayo, los vecinos de Tantará recriminaron al edil por su ausencia en plena pandemia de coronavirus, afirmando que solo había pasado ocho días en el distrito.
Actualmente, Perú, que supera los 108 mil contagios y las 3 mil muertes, es el quinto país con más fallecimientos del continente a causa del coronavirus.