México ya rebasó el umbral del millar de fallecimientos por COVID-19. El último reporte preciso señala que se registró la muerte de mil 69 personas, pero el subsecretario Hugo López-Gatell pronostica que serán entre seis mil y ocho mil víctimas mortales del virus.
En entrevista, explicó que en la mayoría de los países han fallecido entre 50% y 80% de los enfermos de COVID-19, en terapia intensiva. Siguiendo este patrón, y calculando que en México unas 10 mil personas terminarán en estas circunstancias, “estaríamos hablando que seis mil personas, siete mil u ocho mil personas que podrían perder la vida”.
México acumula al momento más de 11 mil 633 casos y mil 69 fallecidos, y se prevé que el pico máximo de contagios tendrá lugar entre el 8 y el 10 de mayo.
El martes se declaró la Fase 3 de contingencia y alargó las medidas de distanciamiento social hasta el 30 de mayo.
El doctor en Epidemiología recordó que entre los pronósticos oficiales se estiman 250 mil personas enfermas y “muchísimas más infectadas” pero sin presentar síntomas. La mitad de estas personas -unas 125 mil- acudiría a atención médica y alrededor de 10 mil 500 requerirían terapia intensiva.
Son cifras que mantenemos como referencia para garantizar los recursos necesarios para atender”, y agregó que en algunos puntos del país se está llegando a un punto de “saturación”, como en la Ciudad de México o Tijuana, pero se mostró confiado en que el proceso de reconversión hospitalaria permitirá tener estas 16 mil camas de terapia intensiva, que contemplan además con un ventilador, monitor y personal médico.
El Gobierno mexicano no aplica pruebas masivas a la población y calcula, mediante el modelo de estimaciones centinela, que los enfermos en el país podrían ser unas nueve veces mayor a la registrada.