-Que el gobierno de Veracruz solicite la devolución de los 3 mil 384 mdp de subejercicio 2019 a la Federación, y se aplique contra el COVID-19, propone.
-El dirigente estatal del PRI, plantea que con esos recursos se ejecuten seis acciones para afrontar la contingencia sanitaria.
Veracruz, Ver., 31 de marzo de 2020. El presidente del CDE del PRI en Veracruz, Marlon Ramírez Marín, pide al gobernador de la entidad, Cuitláhuac García Jiménez, que solicite se devuelvan al Estado los recursos que fueron regresados a la Federación al no ejercerlos en 2019, y que dieron como resultado un subejercicio de recursos públicos, y propone que estos se apliquen en el estado de Veracruz mediante seis acciones que contribuyan a afrontar la emergencia sanitaria de COVID-19.
Ante la situación actual insólita, dijo desde su domicilio y en un video grabado desde su teléfono celular: “haga usted señor gobernador uso de la política, de la mayoría que existe tanto en la cámara local como en la federal, con los diputados de su partido Morena, para solicitar al gobierno del presidente que le sean devueltos al estado los 3 mil 284 millones de pesos que se le dieron a la Federación y no se usaron en 2019”.
El dirigente partidista puntualizó al gobernador que ya en alguna ocasión a Veracruz le azotaron las lluvias y las inundaciones: “organizados fuimos capaces de salir adelante, ahí está como ejemplo el pueblo de Tlacotalpan, que se levantó de una inundación sin precedentes en el año 2010, sociedad y gobierno fuimos capaces de darle una respuesta positiva en momentos complicados”.
“No es momento de profundizar en nuestras diferencias, ya habrá oportunidad para eso, mientras tanto como veracruzano más que como dirigente político, apelo a su buena voluntad y a su deseo de que en Veracruz logremos como lo hemos hecho en otras ocasiones, superar esta grave crisis de salud pública que aqueja a todo el país y a todo el mundo, Veracruz lo demanda y necesita”, resaltó.
Marlon Ramírez Marín especificó que la propuesta contiene seis acciones: la primera se enfoca en equipar los centros de salud, clínicas y hospitales; asimismo en la compra de materiales, herramientas e insumos que cuiden la vida del personal de enfermería, médico y de todos los que hacen posible del cuidado de la salud de nuestro estado de Veracruz.
El segundo punto refiere celebrar convenios con laboratorios locales que permitan el desarrollo de las pruebas de COVID-19, regulando el precio y aportando un subsidio para aquellas personas que deseen hacerse la prueba. Además, adquirir las pruebas necesarias para los centros del sistema de salud de Veracruz, y poder tener certeza de la población afectada y de ser necesario activar espacios físicos para la atención médica.
La tercera acción indica implementar un programa emergente de empleo temporal que se debe desarrollar desde casa, enfocado a sectores vulnerables como taxistas, choferes de servicio urbano, mesero, cocineras, trabajadoras domésticas, boleros, mecánicos, y las personas que van día a día.
La cuarta acción formula convocar a una mesa con el sector primario en la que estén representadas todas las organizaciones campesinas, todas las agrupaciones de productores, de ganaderos, de todos los rubros, que requieren inyección de capital para ampliar la producción y estar en condiciones de enfrentar el posible desabasto de productos.
La quinta acción señala implementar un programa emergente de obras, con el propósito de generar una derrama económica que haga menos complicado el golpe de la recesión económica que se vive a nivel global, dicho programa debe ser ejecutado con empresarios veracruzanos de todas regiones de la entidad, para que el beneficio sea uniforme.
Y la quinta acción expone la instalación de una mesa de atención permanente con las y los presidentes municipales, en los Ayuntamientos, ya que son las primeras autoridades, el primer punto de contacto con la población en general. De esta manera, se tendría un mejor diagnóstico de todo el territorio estatal.
Marlon Ramírez Marín reiteró que “no son tiempos de hacer de la crítica el argumento que nos defina como opositores, hacerlo, más tendría un sesgo de mezquindad, que deseo de apoyar o de construir. Buscar el aplauso fácil es simple, construir es lo que es verdaderamente complicado”.